martes, 28 de diciembre de 2010

ALHAMA/ De romanos a vampiros

El municipio muestra su historia y su leyenda a través de visitas teatralizadas a sus lugares de interés 

28.12.10 - 01:01 - 
La Concejalía de Turismo organiza hoy visitas guiadas por los diferentes rincones de interés del municipio, con la peculiaridad de que en el recorrido se representarán diferentes escenas históricas a cargo del grupo de teatro Sinfín. Las visitas teatralizadas se repetirán el próximo jueves y el el 3 de enero, tienen una duración de algo más de una hora y se repartirán por diferentes rincones y monumentos de la historia local, «una historia que ya está escrita», como recordaba el director del grupo de teatro, José María Cánovas.
Los personajes que aparecerán en las visitas irán desde una pareja de romanos -que mostrarán los orígenes de la localidad, con las termas romanas- a un cantero y el señor que pagó la piedra de la fachada de la iglesia de San Lázaro. Otro de los viajes será hasta la Edad Media, donde un filósofo musulmán hablará del cementerio bajo la calle Empedrá, a la vez que relatará cómo fue la construcción del castillo.
Un túnel del tiempo
El túnel del tiempo trasladará a los visitantes en presencia del rey Jaime I El Conquistador, quien relatará la expulsión de los musulmanes. Llegados al siglo XIV, el protagonista será el marqués de Los Vélez, que se dirigirá a los visitantes desde el antiguo balcón consistorial de la Plaza Vieja, siendo la marquesa la responsable de enseñar la llamada 'cultura del grano' en la Casa de La Tercia y el Pósito Municipal.
El viaje por el tiempo finalizará en el malecón del jardín de Los Mártires de principios del siglo XX. Allí el recorrido suma parte de leyenda y de cuento, como explica Cánovas Vera: «Todos los pueblos tienen leyendas e historias, con personajes de cuento de los que se duda de su veracidad, pero que tienen algo de verdad».
Se refiere al 'vampiro' que visitó la localidad en plena Primera Guerra Mundial, llegando desde Cartagena. Allí se desembarcó su ataúd, dejando un reguero de sangre y muertos, una historia turbulenta que trasladará a los atónitos visitantes hasta una antigua pensión de la calle Corredera, situada junto a una vieja funeraria, es decir, una auténtica historia de miedo.
Por último los visitantes verán unas simpáticas bañistas, las cuales enseñarán las casas señoriales de la localidad y el parque de La Cubana, cerrando la visita las hijas de Santiago Ramón y Cajal, las cuales acompañaban a su padre en sus visitas para disfrutar de las entonces aguas termales del extinto balneario.

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