La sanción es de 50 euros y se rebaja a la mitad si se paga en el momento, aunque puede llegar a 300 euros si se reclama por vía de apremio
25.06.11 - 01:33 -
No pagar el billete del tranvía puede salir caro. Y si no que se lo digan a las 80 personas que, en menos de un mes -concretamente 28 días, ya que la línea 1 se inauguró el pasado 29 de mayo- han querido viajar gratis pensando que nadie se iba a dar cuenta. Ya desde los primeros días de funcionamiento, empleados de la empresa concesionaria y no solo los inspectores se dieron cuenta de que había viajeros que subían al convoy sin haberse sacado un tique o sin validar el bono si es que lo llevaban en el bolso o en el bolsillo.
Pasado un tiempo prudencial de una semana, en el que quedaron solventados los problemas de expedición de billetes y bonos en las máquinas de las paradas, los inspectores del tranvía comenzaron a desarrollar su función pidiendo el billete a los pasajeros o, simplemente, observando el comportamiento de los pasajeros que subían en cada parada para ver si se validaban su bono.
Entre los infractores los hay de varios tipos: los que no sacaron billete de ningún tipo; los que utilizaron el billete ordinario de tarifa urbana (1 euro) para realizar trayectos interurbanos, por lo que han de pagar 1,35 euros y los que llevan bonos pero no los acercan a la máquina que hay junto a la puerta del convoy para validarlo «por si colaba y viajaban gratis». Incluso se ha dado el caso de personas que subían al convoy y no validaban y, cuando veían acercarse al inspector, se apresuraban a validar aunque eran pillados en falta por el revisor. La multa por no pagar el billete es de 50 euros, pero si se paga en el momento al inspector se le rebaja al 50%, por lo que tiene que pagar solo 25 euros. Si el viajero no lleva dinero encima, o prefiere no pagar en el momento, se le entrega la denuncia -como cualquier otra multa de tráfico- y tiene un plazo de 7 días hábiles para pagar. En caso de no pagar, el Ayuntamiento podrá exigírselo por vía de apremio y con recargo, como cualquier multa o impago de recibos como el IBI, pudiendo llegar la sanción a 300 euros. Dada la picaresca de algunos usuarios, la empresa ha reforzado el servicio y en vez de 8 inspectores, habrá 15 personas en labores de vigilancia.
Una decena de personas ha respondido a la campaña de Tranvía de Murcia para entregar su coche a cambio de un bono vitalicio del tranvía. Después de contrastar los datos, siete ofertas se ajustan a las bases. En principio, está previsto escoger la primera oferta para proceder al desguace del vehículo en un lugar público, posiblemente la Avenida de la Libertad, para que todo el que lo desee, pueda presenciar como se destruye un vehículo como símbolo de que habrá un coche menos contaminando la ciudad. Este gesto simbólico se llevará a cabo posiblemente esta próxima semana.
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